domingo, 30 de marzo de 2008

Asuntos privados en lugares públicos

Alain Resnais (Vannes, 1922) ha dirigido sólo dieciséis largometrajes en casi cincuenta años y de los últimos ocho sólo se ha estrenado entre nosotros On connaît la chanson (1997), un pobre resultado comercial para uno de los autores europeos más importantes.

Ahora nos llega su película Coeurs (2006), León de Plata al mejor director en Venecia, que aquí ha sido titulada igual que la obra teatral de 2004 de Alan Ayckbourn (Londres, 1929) que sirve como punto de partida.

El guión está estructurado mediante encuentros en siete decorados de seis personajes visibles y uno escondido, pero importante desde su voz en off. Melancólicos copos de nieve en fundido sirven de transición entre las escenas-encuentros de dos o tres de los personajes.

No vamos a negar la elegancia de la puesta en escena de Resnais, la importancia de los decorados o el punto de vista del plano final en la inmobiliaria es un ejemplo claro, pero la película no convence en su dicotomía drama-comedia ni en su paseo por el filo que separa la ficción del documental psicológico. Los fallidos intentos de lograr la felicidad de los personajes, bien interpretados, se contagian al quiero y no puedo de una película que no sabe ser graciosa cuando lo pretende, la afición al striptease de la recatada oficinista, ni sabe desembarazarse de ese look de calidad francesa que muchas veces chirría por pretencioso.

Calificación: 2/10.

2 comentarios:

José Ángel dijo...

Queda claro que no es uno de tus directores preferidos, jajajajaja

Castedo Merinero dijo...

Me encantan sus cortometrajes, especialmente Noche y niebla, y sus primeras películas Hiroshima, mon amour y El año pasado en Marienbad, pero de eso hace mucho tiempo y parece que ha envejecido también cinematográficamente hablando en sus últimas películas.